[Hunhan] Luminescent II Parte 32

Bueno, ahora ya estoy en casa al menos y tengo un internet medianamente normal (?). El que tenia en el pueblo no me dejaba hacer nada de nada... xDDDD O sea que bueno, por esta semana podre actualizar hoy, lunes, miércoles y viernes. A ver si puedo volver a la época en la que actualizaba 

O sea que eso, nos vemooos *3*

Empezando por enésima vez (Luhan).

Después de la pequeña reconciliación que habíamos tenido todo se volvió más fácil y sencillo. Tuvimos una pequeña charla con Soojeong para aclarar las cosas, luego esta se vistió y salió del apartamento para dejarnos un tiempo a solas. Así podríamos estar tranquilos y en la intimidad, justo lo que hacía mucho tiempo que no teníamos.

-¿Qué paso ayer a la noche aquí? –pregunte al llegar a la cocina y ver cuerdas y pequeñas gotas de sangre en el suelo. Era fácil dudar de que aquellos dos jóvenes se hubiesen dedicado a cumplir extraños fetiches que no pegaban nada con ellos. Sehun se quedo quieto y en silencio, no parecía estar seguro de si debía decir algo o no.

-No es algo que me incumba decirlo a mí –dijo finalmente-. ¿Prefieres tostadas o cereales para desayunar? –preguntó el mientras metía la mano dentro de un armario para buscar algo de comer-. Mi madre trajo el otro día pastel, pero creo que se habrá puesto malo –añadió aquella información que no serbia para nada.

-No te preocupes –repuse yo-. Cuando vaya a casa me tengo que echar a dormir, no lo he hecho durante toda la noche y necesito descansar antes de volver a trabajar, no puedo comer mucho por eso.

Estire el cuerpo de un lado a otro, intentando así permanecer el mayor tiempo posible despierto y alerta. Tenía muy claro que el madrugar o el pasar la noche despierto siempre me hacia mal, luego durante el día entero me sentía de lo más agotado y me era imposible atender incluso a lo que era reamente importante.

-Y ¿por qué no duermes aquí? –propuso como quien no quería la cosa. Lo mire atentamente mientras él seguía preparando cosas para desayunar. Era imposible que sintiese que lo estaba mirando de lo absorto que estaba en lo suyo.

-Tengo que ir a ver qué tal esta Tiarn, y llevarla al parque –explique sentándome en la mesa al ver que él lo hacía todo ya que había cambiado las cosas de sitio y no sabía dónde iba qué.

-Todo eso puedo hacerlo yo –opino él mientras dejaba una taza de leche caliente delante de mi-. Se supone que soy su niñero, yo me encargare de ella mientras tú descansas un rato. ¿Te parece?

La verdad es que la idea me parecía estupenda, pero seguía queriendo ver a mi pequeña hija. No sabía exactamente como se había tomado el pasar parte de la noche en el hospital o el escuchar aquellos disparos. Seguro que la habían asustado mucho y que al llegar a casa les dio trabajo el solo dormirla de nuevo.

Pareció ser que al no obtener ninguna respuesta Sehun se lo tomo como un sí. Me dio indicaciones de donde estaba todo y permiso para acostarme en su cama. Pero yo mismo no estaba seguro de querer dormir en la misma cama en la que horas antes había habido tanta acción. A veces incluso me negaba a sentarme encima de la cama de Yixing al saber que él y Chen habían estado haciendo de las suyas en ella.

Pero al final caí rendido en ella. Hacia un cuarto de hora más o menos que Sehun había salido de casa. Yo me había duchado tranquilamente y aun con el pelo mojado decidí dormir. Había cambiado el colchón, este era más blando que el que yo tenía antaño, pero era cómodo y me intentaba llevar lentamente a la profundidad de mi inconsciente.

Por fin podía volver a decir que Sehun y yo éramos pareja. Novios. Esta palabra hacia que mi mente recordarse los buenos momentos que habíamos compartido, cómo en aquel entonces todo había sido mucho más fácil y cómodo. Antes Sehun era mucho más dócil de lo que se podía considerar ahora. Puede que fuese quejica y que le diese por contradecir todas las palabras que saliesen de mi boca, pero era fácil de contraatacarle y de mostrarle que en realidad no tenía razón.

Eso era incluso divertido. Me voltee sobre la cama para hacerme con más sabanas y mantas antes de que me enfriase. Respire hondo y me abrace a la almohada. ¿Cuánto tiempo había pasado desde la última vez que dormimos los dos juntos en aquella cama? Porque había sido una noche absolutamente perfecta y no me importaría volver a repetir lo que paso allí.

Raramente era capaz de ver a un chico maduro, paciente y sensual cuando miraba a mi nuevo novio, pero aquella noche cambio por completo. Y solamente para complacerme a mí, lo cual me llevaba a tener que complacerlo a él. Las ideas podían brotar fácilmente por mi mente cuando me proponía darle placer a una persona. Siempre había tenido facilidad para este tipo de actos, normal que luego acabase siendo el puto del grupo (aunque tuviese compañeros mucho más promiscuos que yo).

-Oghf… ¿debería de enfadarme? –no pude evitar que las palabras saliesen de mi boca al recordar las dos finas figuras de Sehun y Soojeong entrelazadas en la misma cama en la que yo estaba ahora.

Aunque me hubiese desagradado mucho no tenía ningún derecho a enfadarme. Yo había sido el malo de la película durante un tiempo y aquel “algo malo” había llegado a pasar era culpa mía. O así me lo habían hecho ver al menos. Y podía llegar a comprenderlo hasta cierto punto pero… ¿no era demasiado llevarse la culpa de todo?

Sin aguantarlo más, me levante refunfuñando de la cama. Me vestí con la misma ropa que había llevado a la noche y decidí volver al trabajo. Esperaba poder encontrarme con grandes montones de artículos etc. que mirar para poder dejar de pensar en cosas que ya no merecían la pena.

Además, igual así podía juntarme con Minseok un rato y saber que paso una vez llegaron todos a casa. Nuestro pequeño Zitao debía de estar completamente destrozado después de lo ocurrido. Sin contar con el comedero de cabeza que habrían tenido Chen y Kris, aunque este último se veía relajado a la mañana. Claramente, lo que más me importaba, era el saber cómo se encontraba Tiarn. Ella siempre estaría por encima de todos, de manera inevitable.