[Hunhan] Luminescent Parte 49

No debí enamorarme (Sehun).

Cada una de las palabras que salían de su boca hacía que mi cabeza se hinchase. No quería escuchar sus palabras, no porque no quería creérmelas, si no porque en aquel momento me sentía tan vulnerable a los malos sentimientos de los demás que los notaba como si fuesen los míos propios. Las lágrimas hacía ya tiempo que habían dejado de correr por mis mejillas ya que no tenía ninguna más dentro de mi cuerpo. Me sentía mareado, deshidratado. Sin ganas de querer entender nada de lo que me fuesen a decir.

En ese momento lo que necesitaba era una buena noticia. Algo que me permitiese dejar de pensar en lo que era la realidad. Mi vida. Luhan seguía hablando mientras yo intentaba desconectar de sus palabras, intentando analizar la situación. Mi novio. Mi novio había sido cómplice de asesinato, de mis padres. Nada más y nada menos que de ellos.

Entonces las palabras de Junmyeon recorrieron mi cabeza.

-Y ¿Kyuhyun? –pregunte sin siquiera pensar en lo que estaba diciendo. Había cortado el final de la historia de Luhan, pero este no se mostro molesto, si no aliviado de tener que dejar de hablar sobre ello-. ¿Qué hizo Cho Kyuhyun para que lo asesinarais?

El silencio se hizo prominente en la estancia. Ninguno de los dos hablaba. Yo no era capaz de ello, no por ahora y Luhan parecía estar escaneando toda su cabeza para poder encontrar la respuesta que yo quería. Mejor dicho la respuesta que Kim Junmyeon tanto ansiaba.

-¿Un chico alto de pelo ondulado, joven y con grandes aptitudes para la informática? –no estaba seguro de si hablaba del mismo ya que yo no conocía bien al chico, aun así asentí pues de algo me sonaba lo de sus aptitudes para la informática. Junmyeon cuando estaba muy muy borracho no hacía otra cosa que hablar de su fallecido amigo-. Ese chico… Tuvimos un problema con esa misión –suspiro muy a su pesar-. A mí no me llego bien la información y la cagamos pero ese chico se había metido en nuestra base de datos sin grandes esfuerzos, nuestro hacker no pudo hacer nada por detenerle –explico lentamente para que lo pudiese entender bien-. Nos metieron mucha prisa para hacerlo y… ¿era tu amigo Junmyeon el que...? –no pudo terminar la frase, lo cual me hizo pensar que él se sentía tan mal como yo al escuchar eso.

-Sí, el chico era Junmyeon –asentí y me apresure a seguir hablando para que no me cortases-. Te encargaste de que estuviese lejos… muy lejos –concrete-. Me proporcionaste una cuartada porque en seguida pensarían que yo había matado a mis padres –rompí al llorar al imaginar siquiera esa posibilidad. ¿Matar a mis padres? Pero si no era capaz ni de mirar el cepo de un animal. Me levante y me derrumbe sobre Luhan, el cual me agarro como pudo y acaricio mi espalda intentando darme ánimos de esa manera.

-Sehun… te juro que yo no quería… Yo no quería matar a tus padres, no quería esa misión pero…

Lo acalle besándolo en los labios. No necesitaba escuchar escusas. Los labios del cómplice del asesinato de mis padres sabían tan bien como todas las demás veces que los había besado. Deliciosos. Arañe su espalda de manera desesperada mientras me echaba sobre él. Era imposible que me gustase y agradase tanto el contacto con su piel. Era… era un masoquista. No había otra explicación.

Desde un principio sabía que me había enamorado de un puto. Me había costado mucho llegar a admitírmelo a mí mismo sin sentirme despreciable. Y aunque estar enamorado de Luhan, aun sabiendo lo que había hecho, no me parecía tan malo. Había hecho mal. Tenía que haberme negado en nuestro primer encuentro a acostarme con él. Si hubiese seguido siendo heterosexual nada de esto habría pasado. Me había apartado del camino que debía de llevar y ahí estaba ahora.

Lo bese de tal manera, de una manera tan desesperada que casi nos quedamos sin aire. Y nos podríamos haber ahogado si no fuese porque lo separe de mí con fuerza. Lo agarre con una mano de las mejillas para hacerlo, apretando y clavándole las yemas de mis dedos.

-Huyamos. Huyamos los dos juntos, con Tiarn a un lugar en el que no nos conozcan –suplique. Sabía que era surrealista. No tenía ningún sentido lo que le estaba pidiendo. Pero lo único que me quedaba en este mundo eran mis amigos y Luhan. Nada más. Ellos lo entenderían. Baekhyun y Chanyeol se lo explicarían a los demás, ya que al parecer le tenían cierto aprecio al rubio y lo respetaban-. Cambiémonos los nombres, vayamos a otro país. No nos encontraran y…

Poco a poco deje de agarrar a Luhan con tanto ahincó. No sabía si le estaba haciendo daño o no con mi agarre pero estaba seguro que no era agradable y además, perdía la fuerza poco a poco. A cada palabra.

-Ojala fuera tan fácil –me miro con sus ojos llenos de tristeza-. Te quiero, de verdad.

Agarro mis pelos del cogote, estirando de ellos pero a la vez haciendo que me pegase a sus labios. Deje que hiciese lo que el más quisiese hacer, ya que después de la confesión tan dolorosa para el que me había hecho en cierto modo se lo merecía. Aunque hubiese sido él. Al fin y al cabo en aquellos momentos yo necesitaba de aquel contacto también.

-Lo digo en serio. Seremos como Romeo y Julieta –lamí mis labios al terminar aquel fugaz beso-. Solo que con una niña –aquella propuesta saco una pequeña risa de sus labios, lo cual no comprendí.

-Sehun, Romeo y Julieta acabaron muertos. Se suicidaron.

Fruncí el ceño. No me gustaba ese final. ¿Desde cuándo las historias de alocado amor salían mal?

-Me parecería muy romántico salir huyendo y vivir lejos de todo esto, pero sé por experiencia que con las mafias eso no funciona. He participado en más de un seguimiento y muchas redadas –quede en silencio sin saber que decir. Parecía que ahora se sentía libre de decir cuánto quisiese sobre su trabajo-. Creo… -pronuncio muy a su pesar por lo que note en su tono-. Creo que lo mejor sería que te fueses una temporada con algún amigo tuyo. Necesitas tiempo para asimilarlo todo.