[Hunhan] Luminescent II Parte 14

Lo siento, ahora mismo no puedo contestar los comentarios porque me duermo pero... lo haré antes del siguiente capitulo, de verdad *3*
PD: Yo me quede muy a gusto después de escribir este capitulo, espero que lo disfrutéis igual.

Otra vez dentro del armario (Luhan).

Volví a encerrar otra vez a Sehun conmigo en el mismo armario de la otra vez. Esta vez él me miro con completa indiferencia, como si mi existencia no le importase un bledo. Se había enfadado mucho conmigo, hasta el punto de no querer verme y eso era grave teniendo en cuenta que hasta ahora se había empeñado en querer estar completamente involucrado en mi vida.

-Soy maduro –rompí el silencio-. Y cabezota también –admití porque si no, no me encontraría allí-. Pero soy maduro. He sido capaz de soportar cosas que muchas otras personas no han logrado. Fui torturado y no consiguieron sacarme una sola palabra sobre ti. Porque soy fuerte y maduro. Y quería que vivieses la vida tranquila que te merecías –aquellas bondadosas palabras captaron su atención.

››Si durante estos días te he apartado de mí ha sido para que no te relacionen con el chico que eras hace seis años. Procure, hice todo lo que pude, para que durante estos años vivieses protegido. Hice lo posible para que no supieran quien eras y que no te mataran. Me preocupe por ti y me tome tantas molestias para protegerte como no las he tomado con nadie. Si Tiarn supiera todo lo que he hecho por ti se pondría celosa y no querría verte en su vida ¿sabes?

››Pero tú te has vuelto tan cabezota como yo –alce un poco la voz pues vi que se disponía a hablar-. Y no quieres dejar que te mantenga a salvo. Eres tan estúpido como hace seis años, solamente que ahora no tienes escusa porque se supone que tenías que haber madurado y comprender que es lo que tienes delante de tus ojos. Comprende que si saben que vuelvo a tener cualquier tipo de relación contigo te mataran y todo el trabajo que he hecho durante estos seis años se habrá ido a la mierda.

Nos quedamos en silencio mientras nos mirábamos fijamente. No había mucha luz en el armario ya que lo único que nos alumbraba era la luz de una bombilla económica, una de esas que tiene que pasar un buen rato para que alumbre de una manera medio normal.

-Yo… -parecía cohibido, como si no supiese que decir ante lo que le había confesado. Esperaba que así por fin se diese por vencido, que viese lo que realmente podría pasar si se empeñaba en que siguiésemos juntos-. Gracias gege, pero no puedo evitar sentirme atraído por ti. No quiero que la que una vez fue la persona más importante para mi desaparezca de mi vida pudiendo hacer algo para que no pase. Luhan, no te estoy diciendo que se lo hagas saber a todo el mundo. No quiero que grites a los cuatro vientos que nos queremos y que vamos a ser felices juntos. Solo quiero que me dejes ser feliz a tu lado –concreto-, a estas alturas me da igual que si es siendo pareja o no. Solo quiero…

El choque de nuestros labios interrumpió sus palabras. Su suave voz hacia que me sintiese aun más atraído por él, y cuando se aproximo a mi deje que hiciese lo que quisiese. Hacía tiempo que no me sentía tan tranquilo como en aquel momento. Habíamos conseguido hablar con normalidad y sincerarnos él uno con él otro.

Y supongo que era inevitable que después de esas palabras evitar el roce de nuestros cuerpos. Aunque el inicio el beso en seguida agarre su cuello, haciendo que se agachase más y que curvase la espalda. Como él era tan solo un poco más alto que yo me acorralo fácilmente contra una de las estanterías en las cuales había diversos productos de limpieza. Me llego el olor a desinfectante, pero poco me importo. Apoye mi trasero en una de las baldas para que no se tuviese que curvar casi nada.

Agarro mi camisa por la parte baja y la sacó de debajo del pantalón de manera incontinua. Otro estirón hizo que casi entera dejase de estar sujeta por la prenda de abajo. Metió y acarició mi torso suavemente antes de pasar las manos hacia mi espalda. Aproveche que se separaba un poco de mí para coger aire y meter yo las manos por debajo de su jersey, encontrándome con la camiseta de debajo.

Nos miramos a los ojos mientras nos acariciábamos él uno al otro. Pasase lo que pasase allí dentro no lo tenía porque saber nadie. Nadie sabía que estábamos ahí dentro y nadie podría saber que nos estábamos enrollando. Contorneo mis omóplatos al mismo tiempo que yo le agarraba por el cinturón y le obligaba a pegarse más a mi cuerpo.

Nuestras entrepiernas apenas se tocaron, pero sentí como la mía latía dentro de mi pantalón. ¿Hacia cuanto tiempo que no me encontraba en una situación como esta? Exactamente seis años, ya que después de volver a China me centre en hacer feliz a Tiarn, pasando de tener líos amorosos. Llegaban a doler demasiado.

Mi cuerpo en este momento reaccionaba con poco. Mi pene era la prueba. A penas nos habíamos besado y acariciado un levemente y ya esperaba acción. Aproxime mi boca a su oreja y la lamí y mordí detenidamente. Aquello provoco que me agarrase más firmemente antes de soltar un suspiro lleno de placer.

Pero se aparto de mí, de repente y sin avisar ni nada. Le mire a los ojos confundido. Había agarrado mis brazos y los estaba pegando a mi cuerpo, sin dejar que me moviese. Me miro sonrojado y excitado a la vez. ¿Acaso después de tanto insistir le había dado vergüenza?

No podía ser. Me negaba. No podía dejarme así.

Cuando era joven se lo perdone muchas veces porque era inexperto y debía de estar muy nervioso con aquel tema. Pero ahora, después de seis años, me negaba a que fuese a dejarme tal cual. Tenía derecho a cabrearme ya que él había empezado.

-Lo siento gege, ahora no puedo –se disculpo antes de salir del armario corriendo mientras se ponía bien la ropa.

Yo me quede allí, sin saber qué hacer. Como si estuviese paralizado. ¿En serio había dejado que pasase lo que estaba a punto de pasar hasta que me había dejado plantado? Intente poner mis pensamientos en orden pero no lo logre ya que lo único que era capaz de pensar sin descanso era:

“Odio a Oh y Lee Sehun”.