[Hunhan] Luminescent II Parte 37

Cena, pelicula y... (Luhan).

Prepare sopa para que pudiésemos entrar fácilmente en calor ya que el frío que traíamos desde fuera era insoportable. Pero sabía que nos íbamos a quedar con hambre o sea que prepare unos sencillos entrantes. Sehun esperaba en la sala mientras escogía una película para ver. Al fin podría ver una de adultos o sea que me encontraba realmente aliviado.

-Llevo años viendo películas de princesas ñoñas que encuentran a su príncipe azul a la primera –le comente a la vez que dejaba la comida sobre el mantel que habíamos puesto para no manchar-. ¿Cuál vamos a ver?

Sehun me miro fijamente y levanto las comisuras de los labios ligeramente para crear una sonrisa de labios juntados en su angelical rostro. Empecé a esperarme lo peor, aunque dudaba que fuese a poner una película de princesas. Otra más no gracias.

Justo el día anterior había estado viendo una de las “Winx” con Tiarn y Zitao. Inexplicablemente Tao sabia bastante del tema ya que solían ver juntos la televisión. Después de unas cuantas discusiones sobre lo que debíamos ver y lo que no en casa acabamos comprando varias televisiones. Éramos siete y era difícil que todos quisiéramos ver lo mismo.

Al final siempre acabábamos Xiumin y yo viendo el futbol en la cocina, Yifan y Yixing viendo complicados documentales (y discutiendo sobre las diferentes perspectivas), Tiarn y Zitao viendo dibujos animados y Chen viendo series americanas o hackeando algo con el ordenador.

-Justo he encontrado una película de “Action Man” que veía de pequeño –movió las cejas varias veces intentando no reírse de mi cara-. Solo tengo películas viejas o sea que veremos “Mary Poppins” –me informo y la verdad que aunque no me hiciese ilusión ver esa película la prefería a muchas otras.

-Buscas quitarme toda la libido ¿verdad? –cuestione mientras me sentaba en el sofá a su lado.

-Sabes que acabaremos haciendo poco caso a lo que este puesto –se sentó a mi lado-. Puedo poner “Jumanji” si quieres. La cuestión es ver una película vieja que sepamos como acaba para no perdernos mucho de ella.

Su razonamiento era bastante lógico la verdad, me impresiono y todo. Le indique que prefería ver “Jumangi” a una película de una niñera con un bolso gigantesco. Al menos esta era de aventuras y animales, no de gente drogada que se metía dentro de cuadros y se ponían a cantar cada dos por tres.

-Umsh… la comida está muy rica –me halago cuando ya se había bebido media sopa y comido casi todos los entrantes sin dejarme a mi casi nada-. Hacia tanto que no comía tu comida que esta me sabe a gloria vendita –siguió adulándome antes de dejar el gran tazón en la mesa.

-Eres un pelota –le chinche a la vez que lo agarraba del cuello con fuerza y le obligaba a girarse y acercarse a mí. Cuando lo tuve a apenas unos centímetros de distancia abrí la boca para besarle y él pareció entender lo que venía a continuación porque apoyo ambas manos a cada lado de mis caderas.

Fui inclinando mi cuerpo sobre el suyo hasta apresarle contra el sofá. No recordaba que ese fuese el mismo que tenía yo o sea que me propuse estrenarlo. Acaricie su cuello entero con las manos antes de hacerlo con los labios. Deje que mis manos fuesen desabrochando la camisa que llevaba mientras el intentaba hacer lo mismo con la mía. Los dos estábamos nerviosos o sea que no fue una tarea fácil pero al final acabamos los dos teniendo el torso al descubierto. Y bueno, yo le había desabrochado ya el pantalón pues había sido más rápido que él.

Le obligue a bajarse hasta medio muslo tanto los pantalones como la ropa interior. Me miro entre avergonzado y excitado y aquello me hizo desearlo aun más. Bese su torso al completo para que se tranquilizara un poco y entrase en el tema. Yo solo me desabroche yo solo el pantalón y me quite toda la ropa. Camine hasta su cabeza con las rodillas alrededor de su cuerpo.

-Chupa –le pedí mientras agarraba mi miembro aun sin despertar casi y se lo acercaba a la boca.

-¿Eh? –preguntó sin comprender. Ahora que lo pensaba creo que nunca había llegado a chupármela-. ¿Pero… por qué… eh? –entonces comprendí que no entendía él porque me la tenía que chupar.

-¿¡Me estás diciendo tu que querías ser el que penetraba sin saber que hay que lubricar bien!? –exclame mientras golpeaba su vientre y sentía un escalofrío al imaginar el dolor que iba a causar eso-. ¡Chupa! –le obligue esta vez casi metiéndosela yo mismo en la boca.

Sehun no parecía estar muy seguro de lo que estaba haciendo pero en cuanto se tranquilizo comenzó a faenar. La mamada se sentía torpe, sin experiencia. Incluso pude notar cada uno de sus dientes sobre mi pene. Metí dos dedos en mi boca y los lubrique como de verdad debía de hacerlo. Me separe del cuerpo de Sehun cuando creí que era necesario y volví otra vez hacia atrás bajo su atenta mirada.

Este se poso sobre sus codos para ver de cerca que era lo que estaba haciendo. No sé si para aprender la para siguiente vez o si lo hacía por pura curiosidad. Introduje primero un dedo dentro de su ano, poco a poco para que entrara lentamente. Cuando llegue hasta el tope lo saque un poco y me dispuse a meter otro más. Agache mi cabeza y lamí desde el escroto hasta la entrada, dejando aun más saliva que hiciese la penetración más fácil.

Parecía que el pequeño se moría de ganas de que empezara lo bueno pues su miembro cada vez se excitaba más y pegaba pequeños saltos. Sehun fue a agarrárselo el mismo pero le di un manotazo por el camino.

-Créeme que es mejor que lo dejes así –le mire severamente.

-Pero comienza a… -gimió de repente al notar como rozaba su próstata. Me incorpore, agarre sus piernas y las puse sobre mis hombros. Una a cada lado. Guie mi miembro empapado en saliva y liquido preseminal hasta su entrada y comencé a penetrarlo lentamente.

Los dos nos estremecimos prácticamente a la vez cuando notamos que había llegado hasta el tope. No pude agacharme para besarlo en los labios porque si lo hubiese intentado siquiera lo habría roto por el medio y o quería eso. Gire la cabeza hacia un lado y bese su pierna derecha con suavidad antes de seguir las embestidas que fueron lentas hasta que se acostumbro a mi intruso. Los movimientos de ambos cada vez eran más fuertes y descontrolados, al igual que los gemidos.

Cuando note que en poco tiempo iba a acabar por correrme atine a agarrar suavemente y masturbar con brío el miembro de mi novio haciendo que se corriese sobre su propia barriga. Antes de que yo acabase la saque del lugar y me la masturbe hasta que me vine sobre su vientre también.

Agotado me deje caer sobre el hueco que había a su lado. Respire fuertemente varias veces para recobrar el aliento.

-¿Voy a buscar algo para limpiarte? –pregunte como pidiendo permiso para poder dejarlo solo tan solo un par de segundo.

-Sera mejor –pronuncio con dificultad-. No voy a poder moverme durante toda la noche y la mañana –me informo.